
Volviendo a la Poesía, volviendo siempre...
Hoy mis ojos ateridos de insomnio
estallaron extasiados de amanecer,
invadidos por la polícroma sinfonía
de oros y azules, el sol en su nacer.
*
De otro lado otros distintos ojos
mirarían melancólicos esa su partida,
porque para ellos futuros nocturnos
en nívea luna, sus horas habrían de ser.
*
Durante finitas horas su reinado
de luz y vida bañará en el placer,
el de la caricia en las rubias arenas
Y las flores, sonrientes en su renacer.
*
Como en la vida misma será crecer
para luego pasearse en el cénit,
fugaz reinado al punto de subir
con su caída, empieza a fenecer.
*
Cuando al fin se rinda al abrazo
del horizonte en espera paciente,
para fundirse en azules y ocres
lejos otros ojos, le verán amanecer.
*